
Una tragedia sacudió la costa de Chancay el 6 de febrero cuando una embarcación turística con 16 pasajeros a bordo, incluidos varios niños, se hundió poco después de zarpar. El bote, que debía realizar un recorrido por las playas y el megapuerto, terminó en desastre, dejando a dos víctimas fatales: Estefany Trujillo, de 24 años, y su hija de 7 años. Los sobrevivientes, 14 en total, fueron rescatados con signos de hipotermia, gracias a los chalecos salvavidas que portaban.
El rescate fue inmediato tras el alerta. El personal de la Capitanía de Chancay, apoyado por patrulleras de rescate, logró salvar a los pasajeros, aunque la situación fue dramática. Algunos testigos captaron el momento del siniestro, mostrando la angustia de la tragedia. Los rescatados fueron atendidos por hipotermia, pero la desesperada búsqueda de los dos cuerpos sin vida acabó con un desenlace fatal.
Tras el hundimiento, las autoridades de Chancay tomaron cartas en el asunto, comenzando con la intervención del responsable de la embarcación. Las investigaciones, lideradas por la Policía Nacional del Perú y la Capitanía de Chancay, determinarán las causas del siniestro y si hubo algún incumplimiento de las normativas de seguridad. La comunidad sigue conmocionada por la pérdida de la joven madre y su hija, mientras esperan respuestas sobre el accidente.