El sábado 21 de diciembre, una chocolatada infantil en la zona de San Gabriel, Villa María del Triunfo, se convirtió en escenario de una balacera entre pandilleros supuestamente ligados a grupos de fútbol. Más de diez niños y sus padres tuvieron que tirarse al suelo para protegerse. Los enfrentamientos, que incluyeron disparos y uso de piedras, dejaron a los vecinos aterrados y expusieron la inseguridad que afecta a esta área.
Según los vecinos, estos incidentes no son nuevos y ocurren con frecuencia en la zona debido a la limitada presencia policial y de serenazgo. Pandillas de otras áreas llegan a enfrentarse sin control, poniendo en peligro a las familias. Durante el evento, un policía de civil que asistía con su hijo disparó al aire para dispersar a los involucrados y proteger a los presentes, destacando la ausencia de medidas de seguridad preventivas.
Madres de familia, en un acto desesperado, salieron a la calle para intentar ahuyentar a los pandilleros. Ante la constante amenaza, los vecinos exigen un mayor despliegue policial que brinde seguridad y evite que este tipo de situaciones se repitan, especialmente en actividades destinadas a los niños.