El expresidente Pedro Castillo fue trasladado este 7 de abril al hospital de Ate desde el penal de Barbadillo, debido a una recaída de su lumbalgia crónica, informó su abogado Javier Adrianzén. Este problema de salud ya había sido reportado previamente, y según el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Castillo venía recibiendo atención médica. A pesar de que su condición parecía estar controlada, su dolor de espalda empeoró recientemente.
El traslado del exmandatario se realizó a las 3:47 p.m., custodiado por un fuerte operativo policial que incluía dos camionetas y motocicletas. Este no es el primer problema de salud de Castillo, ya que a mediados de marzo fue visto en silla de ruedas tras sufrir una caída en la ducha durante una huelga de hambre que inició como protesta por el juicio en su contra.
En las audiencias del juicio, que se sigue por el intento de golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022, se ha detallado que Castillo padece tanto de lumbalgia crónica como de gastritis. Durante una de las audiencias, el expresidente mencionó que sentía una «tortura» debido al dolor en su espalda y el epigástrico. Los médicos legistas recomendaron una endoscopia para evaluar su salud gástrica y advirtieron que no debía permanecer sentado por muchas horas debido al agravamiento de su lumbalgia.