Las autoridades mexicanas han confirmado el hallazgo de más restos óseos en una finca del estado de Jalisco, donde la semana pasada fueron descubiertos tres presuntos crematorios clandestinos. El sitio, ubicado en el rancho Izaguirre, en el municipio de Teuchitlán, ya había sido inspeccionado en septiembre pasado, pero nuevas denuncias de colectivos de búsqueda llevaron a su reciente intervención.
El fiscal estatal, Salvador González de los Santos, informó que hasta ahora se han identificado cuatro zonas con restos humanos y una bodega con cientos de prendas de vestir, zapatos y pertenencias de personas desaparecidas. Además, señaló que el predio fue asegurado tras la primera inspección, sin embargo, reconoció que las revisiones «no fueron suficientes», lo que ha generado cuestionamientos sobre posibles omisiones en la investigación.
Jalisco es el estado con mayor número de desaparecidos en México, con casi 15.000 casos registrados, según la Comisión Nacional de Búsqueda. Mientras tanto, en Tamaulipas, otro estado fuertemente afectado por la violencia criminal, un colectivo de familiares de víctimas reportó el hallazgo de un nuevo sitio con restos humanos en la ciudad fronteriza de Reynosa. La crisis de desapariciones sigue en aumento en un país que desde 2006 suma más de 110.000 personas no localizadas.