:max_bytes(150000):strip_icc():focal(749x0:751x2):format(webp)/teen-vape-121224-5c1b1c09974e42339ed1c0633f048bbd.jpg)
Un adolescente de 15 años en Estados Unidos sufrió graves heridas y la amputación de varios dedos tras la explosión de su vape. Aiden Dean Adams desobedeció las advertencias de sus padres sobre los peligros del vapeo y utilizó el dispositivo en secreto. Durante un paseo, el vape no funcionó correctamente, y al intentar arreglarlo, explotó en su rostro, provocando cortes profundos y daños irreparables en sus dedos.
Tras el accidente, Aiden regresó a su casa con la camisa empapada en sangre y parte de su cabello quemado. Sus padres, horrorizados por las lesiones, lo llevaron rápidamente al hospital. Los médicos lograron salvar su pulgar, pero amputaron parte de su dedo medio y el índice. El joven ahora enfrenta un futuro incierto debido a los efectos de esta tragedia.
El caso de Aiden resalta los riesgos asociados con el vapeo, especialmente con dispositivos defectuosos. Aunque muchos los consideran más seguros que los cigarrillos tradicionales, los vapes pueden explotar debido a fallos en las baterías de litio, mal uso o modificaciones. Expertos alertan sobre los peligros de estos dispositivos, especialmente cuando no se adquieren de fuentes confiables.