El Gobierno peruano decidió no extender el contrato de concesión del Proyecto Olmos a la empresa Concesionaria Trasvase Olmos S.A., relacionada con la cuestionada constructora brasileña Odebrecht, ahora conocida como Novonor. Así lo anunció el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, quien declaró que el país no continuará trabajando con compañías manchadas por la corrupción.
La medida fue comunicada durante un evento oficial en Lima, donde el premier fue enfático al señalar que la administración de la presidenta Dina Boluarte busca dar un paso firme contra las malas prácticas empresariales. “No renovaremos con Odebrecht ni con ninguna de sus fachadas”, dijo ante la prensa. Esta decisión refuerza lo dicho meses atrás por el Ministerio de Desarrollo Agrario, que ya había mostrado su rechazo a la prórroga del contrato.
Con esta resolución, el Estado se prepara para abrir una nueva convocatoria internacional y seleccionar a una empresa transparente y eficiente que garantice el funcionamiento del sistema hídrico de Olmos. La obra es clave para el riego de miles de hectáreas en Lambayeque, y su futuro dependerá ahora de un nuevo proceso bajo modalidad de asociación público-privada.