Un devastador atentado con explosivos sacudió la madrugada del domingo 20 de abril en Tumbes, dejando una víctima fatal, varios heridos y al menos veinte viviendas destruidas en la cuadra 1 del asentamiento humano Nuevo Progreso. Según los primeros informes, el ataque fue perpetrado mediante un balón de gas con dinamita colocado en la puerta de la casa de Nelly Olaya Cruz, de 54 años, quien intentó apagarlo con la ayuda de sus vecinos. Sin embargo, la detonación ocurrió en cuestión de segundos, acabando con su vida en el acto.
La explosión causó severos daños en la zona, destruyendo ventanas y estructuras de las viviendas cercanas, mientras que decenas de personas resultaron heridas. Entre los lesionados, se encuentran dos personas que sufrieron graves cortes debido al impacto de los vidrios y escombros, siendo trasladados urgentemente al Hospital Regional de Tumbes. Las víctimas, quienes se encontraban durmiendo en el momento de la explosión, expresaron su desesperación ante el ataque, que dejó, además, daños materiales significativos.
La Policía Nacional de Perú llegó rápidamente al lugar para iniciar las investigaciones y, según los primeros reportes, el atentado podría estar relacionado con un ajuste de cuentas de presuntos delincuentes extranjeros, quienes habrían amenazado previamente a la víctima y su hijo. Este ataque se suma a una serie de incidentes similares en la zona, lo que ha generado una fuerte demanda de los vecinos por mayores medidas de seguridad y protección ante la creciente criminalidad.