El ministro de Salud, César Vásquez, calificó de “criminales” a los responsables del caso del suero defectuoso de Medifarma, tras la muerte de Melissa Esmeralda Guzmán Alarcón, quien se convierte en la quinta víctima en Cusco. Durante su visita a Ica, donde supervisaba el avance de la construcción de un centro de salud, Vásquez no dudó en señalar a los dueños de la farmacéutica y a los responsables de la clínica involucrada. «Este es un crimen, no un accidente. Es una negligencia mortal que no puede quedar impune», afirmó tajantemente.
El ministro también defendió la labor de las instituciones a su cargo y negó cualquier responsabilidad en el caso. «El error fue cometido por los responsables del suero defectuoso. Para nosotros, esto es un crimen», subrayó. Además, Vásquez reveló que sus decisiones contra la farmacéutica y la clínica le han valido una persecución, asegurando que ha sido blanco de presiones por haber tomado acciones contundentes.
La denuncia y las declaraciones del ministro aumentan la presión sobre los responsables del suero defectuoso, mientras las familias de las víctimas continúan exigiendo justicia.