
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, solicitó al Congreso aprobar una medida que imponga la pena de muerte obligatoria a quienes asesinen a agentes policiales. Durante un discurso en Carolina del Sur, aseguró que el país enfrenta una ola de violencia sin precedentes y que es necesario tomar acciones drásticas para frenar la criminalidad. «Los delincuentes reincidentes no pueden seguir poniendo en riesgo a nuestros héroes», enfatizó.
Trump recordó que el 20 de enero, día en que asumió nuevamente la presidencia, firmó una orden ejecutiva para «Restaurar la pena de muerte y proteger la seguridad pública». Sin embargo, señaló que se requiere el respaldo del Congreso para que esta medida tenga mayor alcance y no enfrente obstáculos judiciales. «Es momento de tomar decisiones firmes, ya no podemos permitir que los asesinos sigan libres», agregó.
La propuesta ha generado un intenso debate en el país. Mientras algunos sectores respaldan la idea como una forma de disuadir la violencia contra las fuerzas del orden, organizaciones defensoras de derechos humanos han expresado su rechazo, advirtiendo que la pena de muerte no ha demostrado ser un mecanismo efectivo para reducir el crimen. A pesar de las críticas, Trump reafirmó que su administración hará «todo lo necesario para garantizar la seguridad de los estadounidenses».