La actriz Silvia Pinal, considerada la última diva del cine de oro mexicano, falleció este 28 de noviembre en Ciudad de México a los 93 años. La artista había sido hospitalizada el 21 de noviembre por una infección urinaria, y en sus últimos días recibió cuidados paliativos. Su partida ha causado una profunda conmoción en el mundo del espectáculo, donde es recordada como una figura clave del cine, la televisión y el teatro. Fue especialmente conocida por su conducción del emblemático programa Mujer, casos de la vida real.
En sus últimos momentos, Silvia Pinal estuvo rodeada de su familia, incluidos sus hijos Alejandra Guzmán, Sylvia Pasquel y Luis Enrique Guzmán, así como su nieta Stephanie Salas y su bisnieta Camila Valero. La noticia ha provocado un aluvión de condolencias en redes sociales, destacando su aporte a la cultura mexicana y su legado artístico. Pinal, quien había organizado su testamento para evitar conflictos familiares, deja atrás una dinastía artística que marcó varias generaciones.
Silvia Pinal inició su carrera a finales de los años 40 y alcanzó fama internacional con la trilogía de Luis Buñuel: Viridiana, El ángel exterminador y Simón del desierto. Su trayectoria se extendió a la televisión con programas icónicos y al teatro, consolidándola como una de las artistas más versátiles e influyentes de México. Su legado sigue vivo como símbolo del arte y la cultura en América Latina.